¿Y si te aviento te metes?

Cuandou estábamos en prepa nos agarró una racha de hacer Pisci-carne-asada en la alberca del depa en que vivíamos. Les pusimos ese nombre desde la primera que hicimos, aunque, la verdad, casi nunca asábamos carne y terminábamos comprando tortas de las de 10 bolas 10 o pizza de la domino's.

Las piscinadas se volvieron famosas, principalmente por el grandioso número de pendejadas ocurridas e inventadas durante la realización de aquéllas. Casi todos los domingous de tercero de prepa los pasamos chapoteandou como pindejos. Fue ahí, en esas reuniones, donde por primera vez vio la luz mi famosa rutina de la foca amaestrada y la orca borracha. Fue ahí donde recurrían bromas como la de la chancla huerfanita ("Toriiiiitooooooooooo") y la de "putou el que le dé un calambre", que nunca faltaba después de que arrasábamos con la tragazón.

En una de ésas en las que fuimos, la alberca estaba medio verde. Bueno, machín verde, como que no la habían limpiadou desde hace un buen ratón. Nosotros traíamos la firme intenció de meternos a hacer el desmadre habitual pero la apariencia del agua nos daba cierta... desconfianza. Entonces empezamos a buscar cómplices pa no ser los únicos pindejous dentro de ese pantanou, "he huey, ¿si me meto te metes?" o el solidario "cabrón, si te metes me meto también...". Nadie quería meterse en esa madre y estábamos resignados a platicar pendejadas sin mojarnos la chompa. En eso llega un pindejou a preguntarle a otro huey: "He huey, ¿y si te aviento te metes?" y mientras el pendejou cuestionadou razonaba la pregunta, los hueyes los aventaron a la alberca. Casi me mié de la risa.

Después de eso todos nos metimos a la pinchi alberca, nos valió madre el dengue, la varicela y todas las pinchis enfermedades derivadas del agua en putrefacción. A pesar de que nos lavamos machín bien (para variar) después de salir, al otro día yo andaba con un chingo de comezón por todo el puercou. No hubo pedou, igual nos la pasamos chingón y el agua verde fue una cura más.

Hasta hoy cuando vamos a la pinchi alberca (que es muy a lo pinchi largou), antes de echar al agua a un pindejou llegamos y muy serios le preguntamos "¿si te aviento te metes?" pa arrojarlo entre todos al agua pa que se le vaya quitando lo pindejou con la remojada... como si fuera así de fácil.