sábado, 6 de agosto de 2005

Crónicas puñeteras.

En un restaurant, a puntou de marcharse, dos cabrones discuten, uno más apurado que el otrou:

- Apúrate cabrón, ya trágate esa chingadera.
- Pérate pendejo, toy viendo a las viejas ésas de afuera, ¡chiquillas!.
- Mmmmm... pos nomás las ves dioquis pendejo, dioquis.
- ¿Cuál "de oquis"?... ¿y luego las tres que les voy a dedicar a la noche?...

No hay comentarios.: