martes, 8 de junio de 2004

Hazañas desde el pie de la sierra.

Andando por la calles empedradas y muchas otras no pavimentadas. Saludando a todo el que pasa, todo mundo conoce tu casa. Jalando agua con el Cabechas, el Patas, el Padre Santo (también conocido como la Ponchada), el Chocobananas y visitando El Cielo, como cariñosamente se le conoce al Huizachal (el más popular y tradicional de los 3 burdeles del pueblo), con el Killer y su compadre el Laurito después de la Disco, bien pedos caminando por la calle. Qué chingón se siente que todo mundo quiera pistear contigou.

Siempre expuestos a que el Tontoloco te miente la madre por ningún motivo aparente sale uno a dar el rol a la Plazuela, a ver a las morritas y mandarles saludes pa que se vuelen. Me sorprende la cantidad de morritas buenas y jaladoras que existen en los ranchos, porque tengo entendido que en El Quelite sucede algo similar: ...pos un chingo de morritas buenas y jaladoras. Lo primero sí me consta y qué pena me da confesar que lo segundo no tantou porque, aunque he recibidou varios saludes de morritas que sí llegan a gustarme, no se ha concretadou nada con ninguna. Ahora creo que la razón radica en que la manera de agarrar vieja en los ranchos (por lo que me han contadou) es más sencilla. Por ejemplou: los que trabajan en los camiones de mi amá, choferes y cobradores, aún los más horribles, panzones, chaparros y viejos tienen sus morritas, y nótese que puse los atributos en negritas para resaltarlos en exageración. Y sus métodos consisten en: "¿Qué onda chiquilla?, ¿orita pasando VillUnión nos vamos pa'trás a consolarnos los dos?" y dicho y hecho, en ese momento después de pasar VillUnión el camión se convierte en PornoBus y los detalles salen sobrandou. O sea, en resumidas cuentas, soy demasiadou complicadou (y pindejou...) pa agarrar una vieja de aquí... jajajajajaja, la neta me doy risa, jajaja, qué feo caso...

Viejos recuerdos parecen revivir desde la tumba del olvido. Recuerdo a la primera morrita que me rompió el corazón y me lo dejó roto hasta ahora. La raza del barrio con la que me llevaba. Mis compas más compas de la primaria que ahora nomás pedos platican chilo conmigou. La raza con la que jugaba beis y que ahora casi todos juegan fut.

Andando en el rancho me siento a toda madre, aquí para todos soy el Netito, el de la Carmen de Florinda, y todos son alguien de alguien, como la Tere de Bello, el José de la Maye y el Pancho de la Yoya (que es un tonto que tiene la increíble habilidad de conocer la hora exacta aún y cuando nunca usa reloj). Y los sobrenombres parecen salidos de una película de Alfonso Zayas: el Tambachi, el Huevo, el Yahir (por su "parecido" al cantante), el Peluso (se acuerdan de ese gato de los Tiny Toons?), el Regalado, el Zorra (mi primo), el Camote, el Chanate, el Pecoso, el Chenel (el papá del Zorra), etc, etc...

Pos chiiilou, la neta hay muchas cosas que quisiera contar, pero ahorita como que me da hueva porque se supone que nomás venía a checar mi pinchi mail que no checaba desde hace como una semana y resulta que nomás hay un putou forward y todo lo demás es Correo No Deseadou, así le da pa abajo a uno, y se pregunta si realmente cuenta con cyberamigos... Pos sí, nomas me puse a escribir esta madre por las numerosas peticiones (2) en mi tagboard de que volviera otra vez de nuevo a las andadas de mis pindejadas, o las pindejadas de mis andadas, pero la neta que ya no sé ni qué pedou, ya me wa jetiar, pero antes me wa pegar un bañou cowboy porque me ruge la aleta macizo y como duermo con mi amá Carmen y mi amá Florinda en el cuarto del aire pos como que me da penita. Arremangou pues, demasiadas pindejadas en una sola sentada, no sé si haya batido récord pero de seguro ha de ser uno de mis scores más altos en porcentaje de pindejada por línea. No les digo...

ya pues, este párrafo nomás es pa despedirme de mí mismo y de todos los lectores. ya pronto escribiré pindejadas decentes y desentones (esperemos...) ok pues, la vemos al ra...

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